En el fútbol hay derrotas que duelen, y mucho. La que hoy recibió la "U" ante Chivas de Guadalajara por la Copa Libertadores fue una de ellas. Duele primero porque implicó la eliminación del conjunto azul de este importante certamen continental. Duele además porque el resultado 2 a 0 fue en casa y ante su propio público, coronando una campaña simplemente magra como local. Y además duele porque, a diferencia de la semifinal del 96, ahora el equipo que estaba al frente era totalmente ganable: hace 14 años se cayó contra el River Plate de Enzo Francescoli, Hernán Crespo, Juan Pablo Sorín, Ariel Ortella y Marcelo Gallardo, es decir el mejor River Plate de la historia. En cambio, Chivas de Guadalajara era abordable, pero simplemente no se pudo lograr la meta. Duele por donde se le mire.
Pero tal vez una de las cosas bonitas de este deporte es que nos permite aprender de los errores, y así poner en práctica esas fallas para, en un futuro cercano, convertirlas en virtudes. Una cosa que me llamó mucho la atención es que la "U" sacó muy buenos resultados afuera y malos en casa. Es que de visita se jugaba a no perder, y el esquema 4-4-1-1 permitía ponerle un cerrojo al arco defendido por el buen meta Miguel Pinto. Pero de local, y la intención debía ser otra, el D.T. Gerardo Pelusso ponía el mismo esquema táctico, pero ahora apostando a que las cosas serían diferentes ¿Cómo iba a cambiar tanto un equipo si no cambiaban ni la alineación ni los nombres empleados? En el fútbol si se quiere no perder, hay que emplear las piezas para ello, pero cuando se desea ganar y ser protagonista, también debe empeñarse todo el equipo en eso, lo cual comienza desde el once inicial con que se salta a la cancha hasta la actitud con que se afronte el partido, pasando por una serie de otras variantes que rara vez eran modificadas. Aunque admito que, en lo personal, siempre he sido de la idea de jugar igual en todas las canchas: atacando y ahogando al elenco contrario, algo que muy pocos equipos actuales hacen.
La "U" se vio que tiene una columna vertebral muy sólida, conformado por jugadores como Mauricio Victorino, Miguel Pinto, Felipe Seymur y Wálter Montillo, los cuales son de nivel internacional. Pero para ganar un torneo internacional se necesita un elenco mucho más homogéneo, donde las diferencias entre "los buenos" y "los malos" no sean tan evidentes ¿Cómo se logra eso? De la misma forma en que lo hizo Chivas: con una fuertísima cantera de jugadores formados en casa. No olvidemos que el gran mérito de Chivas es estar en la final de Libertadores sólo con futbolistas mexicanos, muchos de los cuales provienen de las fuerzas básicas de la institución, en las cuales Chivas invierte una millonaria suma año a año, cifra que es incluso mucho más alta que la que gasta en los propios refuerzos. Sólo con esa política de "darle tiraje a la chimenea" en una forma hiper-profesionalizada se puede llegar a suplir los puntos débiles, lo cual a este nivel es una "ventaja comparativa" (término muy usado en Economía) que pocas escuadras del mundo poseen.
¿Qué más? Unas palabras para Chivas, el vencedor de hoy. Si bien deberían sentirse orgullosos del triunfo y de la forma en que se obtuvo, y también de su exitosa política de formación de talentos en casa e identificados plenamente con el club, creo que es una vergüenza que llegue a la final un elenco que jugó la mitad de partidos que la "U". Sí, porque Chivas empezó el torneo recién en octavos de final, debido a que el año pasado había abandonado el campeonato por culpa de la llamada "gripe porcina", un problema totalmente extrafutbolístico. Espero que cosas así no se den nuevamente, aunque haya sido una compensación para muchos "justa". Así, los que deben aprender de este partido no sólo son los jugadores, entrenador y dirigentes de la "U", sino que también la gente que organiza la Copa Libertadores, para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir.
Finalmente, ya no más conclusiones, sino que un sincero agradecimiento a los jugadores de la "U" por habernos hecho ilusionarnos con poder tocar la Copa Libertadores y volver a ponernos en la cúspide del fútbol sudamericano después de 14 años. Para ellos van estas palabras: "Recuerden que siempre contarán con nuestro apoyo, ganen o pierdan, porque ser hincha de este equipo es algo que va más allá del resultado, porque es actitud y es sentimiento lo que nos impulsa. Me siento orgulloso de ser chuncho, tanto ahora en la gloria de una tremenda campaña internacional, como en las derrotas más dolorosas o en las caídas más humillantes. En verdad, gracias por todo muchachos..."
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1 comentario:
Hola!
oye, gracias por tu posteo, recién ahora lo vi. Oye, no hay problema con que saques las cosas que escribo, esa es la idea, para que todos las vean y mientras más gente las vea, mejor. Oye, interesante el tema que dices. De ahí cuando tenga mas tiempo me daré tiempo de investigar, porque en general cuando escribo me gusta hacerlo sobre cosas donde me manejo, o en su defecto cosas que he investigado.
salUdos!
;)
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